Te proporcionamos algunos tips para identificarlo:
- Te exhorta a invertir e implementar instrumentos legales de prevención, en lugar de sólo tomar una postura reactiva cuando surgen problemas en la empresa y, cuya resolución puede resultar inclusive más costosa para la empresa que haber tomado medidas de prevención a tiempo.
- Te mantiene actualizado de las reformas a la Ley de la materia, normas secundarias y criterios de nuestras autoridades laborales, que puedan llegar a impactar tus procesos u operación, con el fin de establecer una estrategia conjunta oportuna para su implementación y evitar riesgos para la empresa.
- Te brinda información clara, concisa y real del status de tu caso, proponiéndote opciones para que tomes decisiones informadas que te permitan evitar un riesgo futuro.
Ejemplo: Las empresas generalmente reciben informes mensuales con el estado actualizado de su cartera de juicios, que incluyen la etapa en la que éstos se encuentran y el riesgo de cada caso. En la práctica hemos detectado que muchos despachos reportan a sus clientes juicios con un riesgo “bajo” o les informan que el asunto “va bien” para el patrón/empresa o que “van a ganar”. No obstante, al llegar a la etapa de la sentencia, el patrón/empresa pierde el litigio y es condenado a pagos absurdos por diversos conceptos, circunstancia que demuestra la falta de información real y fidedigna para la empresa.
- Te resuelve tus casos ágilmente y en tiempos prudentes en lugar de prolongarlos en el tiempo con el fin de cobrarte más honorarios.
Ejemplo: Es bien sabido por todos que las autoridades laborales son sumamente lentas en sus trámites, en especial cuando de juicios se trata. Sin embargo, el factor tiempo es un arma de doble filo para el patrón. Las empresas con una cartera de litigios, generalmente tienen la posibilidad de cerrar/concluir sus asuntos en etapas tempranas del procedimiento a costos “bajos”, pero en la práctica hemos detectado que muchos despachos no cierran esos asuntos (teniendo la posibilidad y autorización correspondiente de la empresa), con el fin de aplazarlos en el tiempo y obtener mayores beneficios bajo el concepto de honorarios (sea cual sea su modalidad: iguala mensual o pago por etapas del proceso), lo que implica que con el transcurso del tiempo, el riesgo y la contingencia económica del juicio incrementará considerablemente para el patrón y resultando en escenarios absurdos donde al final la empresa pagó montos altos por honorarios de su despacho, además de una cantidad muy superior para cerrar el juicio “aplazado”, en comparación con la cantidad que pudo haber erogado en etapas tempranas para ello.
- Te ayuda a disminuir costos.
Ejemplo: En la práctica hemos detectado que muchos despachos fungen como meros intermediarios de los recursos financieros de la Empresa, es decir, no generan un ahorro para la misma y no aportan algún “valor agregado”, lo cual se ilustra con el siguiente caso reciente:
El representante legal (interno) de una de nuestras empresas (cliente de recién ingreso), nos comentó: “El despacho anterior a ustedes siempre nos asesoraba en el sentido de que teníamos que pagar las liquidaciones completas (al 100% o inclusive más) a trabajadores que considerábamos que eran acreedores a un despido justificado por haber cometido robos, acoso sexual, etc. (alguna causa grave), bajo la justificación de que la Empresa no tenía elementos para el despido justificado. Nosotros siempre les solicitábamos con anticipación que nos asesoraran para obtener los elementos que necesitaban para efectuar un despido justificado en esos casos complicados o graves, pero con ellos todo se resumía a una actitud de “PAGA y no cuestiones”, por lo que prácticamente la Empresa era una cartera abierta y ya todos querían su liquidación. Con ustedes (Méndez & Asociados), en muy poco tiempo hemos visto un ahorro bastante significativo en el pago de liquidaciones e indemnizaciones y nos han capacitado en como sí hacer las cosas bien para no andar premiando con pago de liquidaciones a quienes cometen esas conductas que consideramos tan graves”.
- Permite una buena sinergia y comunicación entre tus representantes internos que fungen como contacto directo entre la Empresa y el despacho, es decir, tu área de Recursos Humanos, Relaciones Laborales o Legal.
- Evita la inflexibilidad y el autoritarismo, buscando soluciones o alternativas a los requerimientos que realizas.
Ejemplo: En la práctica hemos detectado que muchos despachos, principalmente los de mayor antigüedad en el mercado, se muestran tajantes y cerrados ante los diversos requerimientos que les plantean sus clientes y bajo el estandarte que se puede resumir en las siguientes frases sintéticas: “eso no se puede hacer” (sin proponerte opciones, alternativas o llegar a un consenso de hasta que punto si se puede hacer pero asumiendo ciertos riesgos), “porque somos tu abogados” (tienes que hacer lo que se te dice porque el abogado es el que sabe más y sin que tengas derecho a cuestionar, proponer o debatir).
- Se mantiene actualizado y a la vanguardia, participando activamente en las transformaciones propiciadas por las reformas a la ley.
Ejemplo: En la práctica hemos detectado que muchos despachos, principalmente los de mayor antigüedad en el mercado, siguen implementando con sus clientes estrategias superadas y obsoletas como resulta la de pagar salario sólo con dinero en efectivo, no dar seguro social, no suscribir un contrato, etc. con el fin de desconocer la relación laboral ante cualquier conflicto (en el caso de las pequeñas empresas); las cuales actualmente ponen en un alto grado de riesgo a sus clientes por no actualizarse y conocer los cambios y criterios vigentes de nuestras autoridades a través de la interacción con éstas (principalmente con las de “reciente creación”).